Dani Mayo, que defendiera la camiseta como jugador de importantes equipos como el Platense de Argentina y el Numancia en Espanya, ha debutado esta temporada com entrenador del Ciutat d’Alzira, una experiencia de la que reconoce "he aprendido muchísimo, sobre todo de los jugadores".
Mayo ha hecho doblete en su primer año como tècnico , al entrenar al amater de Segunda Regional i al Infantil, equipos a los que ha dejado clasificados en mitad de la tabla. "Los mayores empezaron bien la liga pero hicieron una segunda vuelta bastante irregular, en cambio los infantiles fueron de menos a más y en la segunda vuelta tan sólo perdieron frente a los cuatro primeros del grupo", dice el técnico argentino afincado en Alzira.
Nuevos métodos de trabajo
Dani Mayo se muestra firme partidario de dar oportunidades a los técnicos jóvenes, tal y como han decidido el FC Barcelona con Tito Vilanova i el Valencia CF con "El Flaco" Pelegrino. "En la Pimera División espanyola hace tiempo que estàn los mismos como Clemente y Lotina" lamenta y añade "el fútbol ha cambiado mucho, se utilizan nuevos métodos de trabajo, creo que los veteranos están muy encasillados en una determinada forma de trabajar".
Lo más difícil es ser justo
Dani, se enfrentó en su etapa de defensa central del Platense varias veces a Pelegrino que defendía la camisetadel Vélez Sarfield, "le marcaba en los saques de esquina" recuerda porque era el más alto de su equipo. Mayo se alegra que entrene la próxima temporada al Valencia, "es una persona correcta, se merece una oportunidad después de haber tenido un gran maestro como Rafa Benítez".
El entrenador del Ciutat d’Alzira reconoce que "no es lo mismo estar en el campo que en un vestuario, he aprendido muchísimo de los jugadores tanto de la parte futbolística como de la humana". Para Mayo "lo más difícil es ser justo con las alineaciones, seguramente me habré equivocado más de una vez, pero de los errores se aprende, seguro que de cara al futuro me vendrá fenomenal".
Ahora que ve el fútbol desde el banquillo reconoce que "el jugador de fútbol es muy egoista, siempre quiere jugar y nunca entiende cuando le cambian, la verdad es que el jugador, con su comportamiento, es el que se pone y se quita de las alineaciones".
Riberaexpress