
Una delegación de unas 60 personas venidas desde el Estado de Paraná (Brasil), el Cantón de Upala (Costa Rica) y el distrito africano de Agua Grande en SantoTomé Príncipe asisten durante estos días a unas jornadas para poner en marcha, gracias al proyecto Caldes de la Unión Europea, una serie de proyecto que mejorará la vida de los ciudadanos en estos países.
Con un presupuesto de 1,2 millones de euros, financiados casi en su totalidad por la UE, la Mancomunitat de la Ribera Alta realizará una serie de cursos de capacitación a las distintas autoridades que han llegado a la Ribera desde estos tres países.
La presidenta de la Mancomunitat, Rosa Sebastià, la “importancia de estos proyestos, y sin duda el papel que ha jugado nuestra institución para impulsarlos”.
Así, en el Estado de Paraná se llevará a cabo el proyecto de una planta de residuos sólidos, mientras que en el Cantón de Upala se apostará por una depuradora y en el país africano por un estudio de movilidad.
Esta mañana la presidenta de la Mancomunitat de la Ribera Alta recibió a esta delegación y les dio la bienvenida en la sede de este ente en Alzira.